b'Recuperar el vnculodel hombre con la tierraJos vende productos orgnicos en la feria barrial de Parque Batlle. Es joven, con la piel curtida y las manos speras. Es productor, vendedor, cobrador y reponedor de su propio puesto de venta. Un pequeo cartel pintado con tiza, colocado sobre la mercadera, anuncia: Productos orgnicos, y al lado hay un nmero de telfono celular. Es lo nico que lo diferencia de los puestos contiguos. Aunque, mirando con detenimiento, no es lo nico. Parecera que los productos que vende tampoco fueran los mismos. No se parecen a las fotos del catlogo de frutas y verduras del supermercado. A simple vista se podra decir que son ms feos, ms chicos, tienen forma irregular y colores ms apagados. Adems, el puesto de Jos tampoco tiene mucha oferta: boniatos, calabacines, albahacas, acelgas, espinacas y algunas especias. Sin embargo, en esa fra maana de julio no par de vender. Dice que siempre es as, que antes del medioda ya no le queda nada que ofrecer. Es que, segn explica, los vecinos que consumen productos orgnicos son cada vez ms, y comnmente son los que estn ms informados sobre la forma en que se producen, sin herbicidas ni fertilizantes de37laboratorio. Los valoran, y conversamos sobre agroecologa cada vez que vienen. Un vecino llega directo al puesto de Jos y saluda amistosamente. Elige sin preguntar el precio y coloca todo lo comprado en su carrito, sin utilizar ni una bolsa. Otra seora se acerca con un montoncito de maples vacos para huevos y se los devuelve a Jos. En vez de tirarlos, me los devuelven, dice complacido, y comenta: El cambio de actitud no est solo en comprar orgnico; los vecinos tratan de ser coherentes con una forma de vida, tienen una mayor conciencia respecto del ambiente, por eso reciclan o tratan de no usar el plstico.Su nombre completo es Jos Castro e integra la Red de Agroecologa de Uruguay. Vive en una quinta en Sauce, y junto con otros productores pertenece a la Regional Santoral, que se rene semanalmente para tratar temas referidos a la agroecologa. Participan en ferias y encuentros y estn todo el tiempo formndose e intercambiando experiencias. El suyo es uno de los 150 establecimientos certificados como agroecolgicos en nuestro pas. Piensa que su cometido no es simplemente producir para sobrevivir, milita por la causa de la agroecologa y el cuidado del ambiente. La agroecologa es volver a la raz, es recuperar el vnculo del hombre con la tierra, y respetarla. Es filosofa, pensar e intercambiar con el otro sobre cmo estamos tratando a quien nos est dando de comer.'