ALMANAQUE BSE 2019_ 191 para la ciencia fue el botánico, naturalista y religioso montevideano Dámaso Antonio Larrañaga (1771- 1848); inspirado en el nombre que los guaraníes daban a esos árboles, lo denominó Ficus guapoi La- rrañaga (Larrañaga, 1927). Los manuscritos de Larrañaga permanecieron inédi- tos y desordenados hasta que los recibiera el doctor Andrés Lamas de parte de los sobrinos del primero. Luego de la muerte de Lamas, bajo la presidencia de José Batlle y Ordóñez, se adquieren por parte del Estado los escritos de Larrañaga, los que son pu- blicados entre 1922 y 1930. Como resultado, la co- munidad científica tuvo noticia, más precisamente en 1927, del nombre otorgado por Larrañaga a esta especie. Mientras esta historia ocurría, el botánico alemán Friedrich Anton Wilhelm Miquel (1811-1871) en 1853 describe y publica esta misma especie con el nombre Urostigma luschnathianum Miq. (Miquel, 1853). Posteriormente el mismo autor en el año 1867 modifica el género reconociéndolo en una nue- va publicación como Ficus luschnathiana (Miq.) Miq. (Miquel, 1867). Debido a la fecha de las publicacio- nes, el nombre de Larrañaga quedó como parte de la sinonimia pese a haberlo descrito científicamente antes que Miquel. Distribución natural La especie es originaria de Sudamérica y habita en Brasil, Paraguay, Uruguay y el norte argentino. En nuestro país se localiza en todo el norte, en Artigas, Rivera, Tacuarembó y Cerro Largo, en las zonas de sierra del este y sur del país, en los departamentos de Treinta y Tres, Lavalleja, Rocha y Maldonado, así como en las selvas en galería en las proximida- des del Río Uruguay hasta Colonia (Brussa y Grela, 2007). En las quebradas de la Laguna Negra existe otra especie de higuerón cuyo nombre científico es Ficus cestrifolia Schott ex Spreng. (= F. organensis Miq.) al que se lo ha confundido con el higuerón de este artículo. Comentarios finales A pesar de ser una especie de amplia distribución ya no es tan común encontrar al arlequín de Cayena y se lo ha integrado a las Listas Rojas de insectos protegidos en países como Venezuela. La elimina- ción de zonas de bosques está afectando de forma dramática las poblaciones de Acrocinus longimanus sobre todo en países como Argentina. La destruc- ción del bosque en galería sería la causa del despla- zamiento de esta especie hacia el nordeste argenti- no. En el caso concreto para los hallazgos en Cerro Largo, luego de recorrer en forma exhaustiva toda la zona, las observaciones realizadas permiten es- tablecer a priori que los arlequines tienen preferen- cia por los ejemplares cultivados de higuerones, no registrándose su presencia hasta ahora en árboles dentro del bosque nativo. Agradecimientos: Los autores agradecen los apor- tes y apoyo de María Laura García de Souza, Fredy Araújo, Santiago Capote y Forestal Atlántico Sur. ------------------------------------------------ BIBLIOGRAFÍA • Miquel, F.A.W. (1867). Ficus luschnathiana. Annales Musei Botanici Lugduno-Batavi 3: 298p. • Brussa, C.A. y Grela, I. (2007). Flora Arbórea del Uruguay: con énfasis en las especies de Rivera y Tacuarembó. COFUSA, Rivera, Uruguay. 196-197 pp. • Miquel, F.A.W. (1853). Urostigma luschnathianum. Flora Brasiliensis 4(1): 101-102 pp. • Pérez Maricevich, F. (1998). Mitos y leyendas del Paraguay. Editorial El Lector, 187 pp. • El País. (2016). El insecto gigante que sorprendió a los vecinos de Melo. (25 de abril de 2016). Recuperado de: https://www.elpais.com.uy/ informacion/insecto-gigante-sorprendio-vecinos- melo.html • Larrañaga, D. A. (1927). Escritos de Don Dámaso Antonio Larrañaga: Atlas Parte I-Botánica. Instituto Histórico y Geográfico