ALMANAQUE BSE 2018 139 Están los fanáticos del fútbol, los fanáticos del mate y hasta los fanáticos del vino. Pero también encon- tramos a aquellos que se obsesionan con una serie de televisión o un videojuego. Ellos son los protagonis- tas de este artículo: los frikis. El término friki proviene de la palabra inglesa freak, que hace referencia según la Real Academia Es- pañola, a lo extraño, estrafalario y fuera de lo común. En la antigüedad, el término se utilizaba para describir a los personajes de circo más fenomenales como la mujer barbuda o los enanos. Con el tiem- po, el concepto se fue transformando y comenzó a aplicarse sobre quienes tenían intereses y hobbies distintos a los de la mayoría. Tener gusto por los comics, el cine fantasía, la li- teratura mágica o el animé, es lo que en la actualidad diferencia a una persona con intereses comunes de un friki. Los frikis tomaron elementos de la cultura nor- teamericana y de la asiática para construir su esencia. Hoy, esta comunidad tan particular se conforma por los fanáticos del animé y el manga, del cosplay, de los videojuegos, de los juegos de rol, de la televisión y el cine temático y de los comics. ANIMÉ Y MANGA Muchos creen que son la misma cosa, pero no es así. Lo único que tienen en común es el país en donde se originaron, Japón, y el que presenten como elemen- to principal ilustraciones. El manga es un producto gráfico impreso, en blanco y negro, similar a los comics. Abarca tanto historias reales como fantásticas y temáticas dispa- res, con el fin de atraer público de todas las edades. El animé, por otro lado, es la representación anima- da de una historia. Muchos mangas fueron adapta- dos como animé. En Uruguay es significativamente más popular el animé que el manga, dado a que el último no es traducido al español. Se requiere saber japonés o in- glés para poder leerlos. En cambio los animé llegan al país en castellano. Series como Supercampeones, Saylor Moon, Dragon Ball, Pokemon y Heidi han sa- bido conquistar los corazones de cientos de urugua- yos desde la década de 1960. En la actualidad, los frikis son los que popularizan estas producciones, a través de internet, redes socia- les, ferias y eventos temáticos. COSPLAY Con la ayuda de un disfraz, maquillaje y actuación, se busca imitar al personaje de algún videojuego, comic, film o manga. Los frikis que practican cos- play, dedican mucho tiempo y dinero para que el resultado final sea excelente. Estudian en detalle las poses, gestos, vestuario y personalidad del personaje que van a interpretar, con el fin de representarlo a la perfección. Uno de los momentos más esperados en los even- tosfrikideUruguayydelmundoeselconcursodecos- play.Cientosdepersonassepresentansobreunescena- rio,antejuecesespecializados,esperandosercoronadas como el mejor cosplayer. El año pasado se llevó a cabo, en la ciudad de Montevideo, la 15° edición del Montevideo Co- mics. Personajes como Thor, Loki y Capitán Gar- fio se hicieron presentes en el escenario central del evento y sorprendieron a la audiencia con sus des- pliegues de producción. VIDEOJUEGOS A quienes se apasionan por los videojuegos y no pueden soltar el joystick, la cultura friki los llama gamers (jugadores). Títulos de género rol, aventu- ra, arcade, magia y fantasía son los favoritos para este tipo de público. Dedican horas en superar cada nivel, cada misión. Invierten no solo tiempo, sino también dinero para avanzar en el juego y ser el mejor de cada partida. Los videojuegos más po- pulares son los de fantasía y rol en donde el usuario debe escoger un personaje, seguir pistas y cumplir misiones. La forma más divertida de hacerlo es uti- lizando el formato multijugador, es decir, forman- do grupos, con personas conocidas o con descono- cidos de cualquier lugar del mundo. Es a partir de los videojuegos que muchos frikis amantes del cosplay, eligen al personaje que van a re- presentar.