ALMANAQUE BSE 2018 160 adecuada del mismo. No debe pasarse solamente por agua de la canilla, ya que el trapo de secado produce contaminación y posteriormente de manos y/o superficies. Por lo tanto, debe lavarse siempre con agua caliente y jabón y secar con toalla de papel. • Elaborar mayonesa con anticipación y en cantidades excesivas. Como primer punto se debe minimizar el tiempo que transcurre entre la elaboración y el consumo de los alimentos que con- tengan huevo, extremando las medidas de higiene. Por otra parte, se debe preparar la cantidad de ma- yonesa que se va a consumir y mezclarla con la can- tidad de ensalada o preparación culinaria que se va a consumir en esa comida. Por todo lo anterior es recomendable que se utilice mayonesa comercial. • Dejar que transcurra un largo tiempo entre la elaboración del alimento y su almacenamiento en la heladera. Durante el tiempo de enfriamien- to del alimento previo a guardarlo en la heladera, los microorganismos patógenos pueden encontrar las condiciones apropiadas para su multiplicación. Tampoco es beneficioso introducirlos aún calientes en la heladera porque podrían aumentar la tempe- ratura en el interior de la misma y comprometer la inocuidad de los alimentos allí guardados. Por lo tanto, los alimentos cocidos y calientes deben estar un máximo de dos horas a temperatura ambiente antes de llevarlos a la heladera o una hora si la tem- peratura ambiental es elevada. • Preparar alimentos con anticipación y guar- darlos en el horno o en la mesada a temperatura ambiente. Habitualmente es un problema de espa- cio. Los alimentos ya elaborados (en platos, fuentes o cazuelas) quedan prontos esperando su consumo a temperatura ambiente. Para evitar problemas de contaminación, siempre deben refrigerarse. • Probar alimentos para percibir si “aún se en- cuentran en buen estado”. Los microorganismos que provocan ETAs no son alterantes, es decir que no manifiestan signos de deterioro. Es prácticamen- te imposible descubrir la contaminación al probar el alimento en cuestión, ya que generalmente no ten- drá aspecto, olor ni sabor diferente. • Utilizar utensilios de madera. Las tablas de cor- tar tradicionales son de madera pero desde hace un tiempo se ha extendido el uso de tablas de plástico que ofrecen características semejantes. La madera es porosa, difícil de limpiar y pueden quedar sobras de comida que facilitan una posterior contaminación microbiana de los alimentos que se manejan sobre las tablas. Esto mismo ocurre con otros utensilios de cocina, como por ejemplo las cucharas de madera. Por lo tanto, es recomendable utilizar utensilios y tablas de plástico y varias tablas distintas con el fin de evitar contaminaciones entre los distintos ali- PIXABAY