ALMANAQUE BSE 2018 206 ¿POR QUÉ NECESITAMOS ÁRBOLES EN LA CIUDAD? Los árboles en las ciudades proveen múltiples be- neficios ambientales, sociales y económicos, ya que modifican el microclima urbano amortiguando temperaturas extremas al sombrear o resguardar las superficies. Además de estos beneficios, habitual- mente tangibles por los habitantes de las ciudades, el arbolado captura partículas contaminantes del aire, provee aislamiento acústico, controla el agua de es- correntía, además de contribuir a la calidad de vida de las personas mediante el uso de los espacios libres, la recreación y permitiendo que el medio urbano sea más agradable para vivir y convivir. Debido a sus múltiples contribuciones, los ár- boles en las calles deberían ser considerados como una necesidad y no como un objeto de lujo. Para potenciar los beneficios de los árboles es necesario planificar, diseñar y manejar los árboles urbanos correctamente, ya que un manejo inadecuado po- dría reducir los beneficios e incrementar los costos de mantenimiento. Árboles en la ciudad MONTEVIDEO Y SUS VEREDAS GABRIELA JOLOCHIN Y EMILIO TERRANI INGENIEROS AGRÓNOMOS (*) Montevideo cuenta con más de 210.000 árboles en sus veredas y se estima unos 100.000 más en parques y plazas, por lo que existirían aproximadamente un árbol por cada cuatro personas, cifra que se destaca entre las demás capitales latinoamericanas. ¿CUÁL ES LA MEJOR ESPECIE PARA EL ARBOLADO URBANO? Ésta es una de las primeras preguntas que debería- mos hacernos cuando pensamos en los árboles fuera de los bosques. ¿Qué características deberían tener las especies seleccionadas para el arbolado urbano público de veredas de nuestras ciudades? Sí, todo eso; urbano, público y de veredas. ¿Por qué tan es- pecífico? Todos los árboles de las ciudades, tanto ur- banos como suburbanos forman parte del arbolado, pero solamente el público – entendido como aquel que se encuentra en las áreas comunes utilizadas por los ciudadanos – es mantenido por el gobierno municipal y debe ser tenido en cuenta en las plani- ficaciones, tanto para el manejo como en el presu- puesto, con el objetivo de beneficiar a todos los que habitan o visitan la ciudad. Sí, y es específico para las veredas de nuestras ciudades, debido a que, por características ambientales del país, deberíamos se- leccionar especies cuyo follaje permita la entrada de luz en el invierno y brinde su máximo sombreado en el verano en nuestras calles. Las copas de los árboles * GABRIELA JOLOCHIN ES MAGÍSTER EN CIENCIAS BIOLÓGICAS, OPCIÓN BOTÁNICA EMILIO TERRANI ES ASPIRANTE A MAGÍSTER EN CIENCIAS AGRONÓMICAS, OPCIÓN CIENCIAS VEGETALES