ALMANAQUE BSE 2018 94 nuestro país conforman una colectividad muy im- portante. Desde siempre ha existido una migración silenciosa en las fronteras de nuestro país con el ve- cino norteño, una balanza que se ajusta acorde a la oferta laboral y a los cambios en la cotización de la moneda. Otros han elegido Montevideo y Punta del Este priorizando el anonimato y la seguridad. En el caso de los peruanos, los primeros llegaron a partir de 1990 desde Lima y luego desde el norte del Perú, de la ciudad de Chiclayo, capital del de- partamento de Lambayeque, y desde los departa- mentos de Piura, Cajamarca, y Junín, conformando una colectividad que alcanza a los 4.500 residentes. Algunos de ellos habían pasado previamente por Argentina. Se dedicaron a la pesca, a la construcción y al servicio doméstico y trajeron consigo sus platos y sus costumbres. La situación política y económica de Venezuela provocó la partida de más de un mi- llón de sus habitantes en los últimos 20 años. Desde el 2014 llegaron unos 5.000 venezolanos, muchos de ellos jóvenes, y se espera que el proceso continúe e incluso se incremente. Un porcentaje importante posee estudios universitarios y la reválida de sus tí- tulos es una de sus principales preocupaciones. De Cuba hay antecedentes de inmigrantes des- de hace décadas, pero en el último tiempo se ha in- tensificado la cantidad de ciudadanos cubanos que se han instalado en el país, muchos de ellos profesio- nales en áreas de tecnología. Otros de origen cari- beño son los que vienen de República Dominicana. Desde el 2011 comenzaron a llegar al país y con la inserción de los primeros el número de ciudadanos de esta procedencia se incrementó; los datos oficia- les de Migraciones muestran que en 2013 ingresa- ron 1.870 dominicanos y un año después 2.889. Se calcula que esa colectividad está compuesta por una cifra superior a los 6.000 integrantes. Con la crisis española de 2008, España volvió a ofrecer pocas posibilidades para sus jóvenes, por lo quealosespañolesquehabíanllegadodesdehacemás de 60 años, se les suma ahora el arribo de una nueva corriente de personas menores a 40 años, graduados universitarios, técnicos y personas con formación, que encuentran en Uruguay un lugar de oportunida- des con un estilo de vida relajado. También se percibe el arribo de ciudadanos alemanes en los últimos años, tanto en la capital como en el interior del país. Desde la instalación en Uruguay de empresas de origen indio, como Tata Consulting, los residentes de este origen llegan a los 500. La mayoría trabaja en zona franca pero su presencia se hace evidente en barrios de la franja costera montevideana. De China llegaron unos 300 inmigrantes que se establecieron en la capital, algunos se dedican a regentear alma- cenes o pequeños supermercados de barrio. Para completar esta diversidad y como parte del fenóme- no de migraciones individuales, últimamente se han sumado franceses, ingleses, suizos, canadienses, aus- tralianos, neozelandeses, africanos, coreanos y desde Magalí, argentina en Uruguay